La contaminación acústica es uno de los problemas que se puede encontrar al vivir en una zona de elevado desarrollo urbano. Por ejemplo, en la ciudad estadounidense de Nueva York, según el Departamento de Protección Ambiental de esta urbe, diariamente se sobrepasa los 55 decibeles recomendados como límite superior por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En la Ciudad de México también existen algunas zonas donde hablar de contaminación acústica no es nada exagerado.
En consecuencia, se va incrementando el número de personas que desea visitar un lugar tranquilo para reposar y recobrar un buen estado anímico. Existen, por supuesto, varios lugares de este tipo como hoteles, resorts, o casas vacacionales. Pero, probablemente, no sabes que existen edificios como monasterios, castillos o proyectos habitacionales ecológicos que fueron erigidos en lugares apartados para encontrar la paz y el sosiego que no se halla en las ciudades. Algunos de estos se pueden visitar, pero vale la pena también admirarlos en las siguientes imágenes e intentar, así, impregnarse de la serenidad que se puede percibir en estos edificios.