Gabriel García Márquez fue un escritor colombiano que ganó el premio Nobel de Literatura en 1982. Formó parte del Boom Latinoamericano, un movimiento que llevó a las letras de estos países a recorrer el mundo durante las décadas de los sesenta y setenta. Su escritura describe a detalle los paisajes colombianos con historias que se enmarcan dentro del Realismo Mágico.

Para determinar sus narrativas, Gabo, como fue conocido por las personas cercanas a él, tomó inspiración de los lugares en los que vivió. Sus casas se convirtieron en el pretexto perfecto para dar rienda a su imaginación y asomarse a la ventana para encontrarse con un montón de casualidades enmarcadas en la cotidianidad. Lamudi, el portal inmobiliario líder en México, te presenta tres casas en las que vivió:

Aracata

Es un pequeño pueblo del departamento de la Magdalena, Colombia. Aquí nació este personaje, cuyos primeros años estuvieron al cuidado de sus abuelos, los cuales se convertirían en piezas fundamentales para la creación de sus personajes al igual que el resto de su familia. Por ejemplo, su abuela sirvió de modelo para Úrsula Iguarán, de la novela Cien Años de Soledad; de sus padres nació El amor en los tiempos del Cólera;  y de la cotidianidad de su pueblo La Hojarasca.

Hoy su casa no existe, pero el Ministerio de Cultura de Colombia construyó un museo en este lugar en honor al novelista. Se diseñaron 14 habitaciones caribeñas decoradas con muebles de las primeras décadas del siglo veinte. La distribución del sitio está basada en el libro Vivir para contarla, de tal forma que refleja una idea de la vida diaria de la familia en esos años. Este lugar tiene la aprobación de la Academia del Premio Nobel y para su realización colaboraron varios miembros de la familia de Gabo.  

San Ángel

Desde la década de los sesenta, Gabriel García Márquez se trasladó a México, en donde pasó gran parte de su vida; fue justo aquí en donde se consolidó dentro del movimiento latinoamericano y como escritor. Su casa se encontraba en un modesto barrio de San Ángel en la delegación Álvaro Obregón; este lugar marco su obra al tratarse de un sitio de un encanto mágico.

Esto al grado de que fue precisamente su casa en la Calle de La Loma la que vio nacer su novela más famosa: Cien años de soledad. Se cuenta que escribió durante dieciocho meses  seis horas diarias para terminar este libro que comenzó a escribir en 1965 y que hoy en día sigue siendo uno de los más vendidos alrededor del mundo.

Ángeles de Pedregal

Con el tiempo, se mudó a una colonia del sur en la Ciudad de México en donde pasó sus últimos 30 años y dónde supo que había sido galardonado como ganador del Premio Nobel de Literatura en 1982. Este también fue el lugar en el que dejo el mundo de las letras cuando falleció a principios del 2014, dejando a su paso un montón de personas agradecidas por las historias simples que les contó.

“La vida no es la que uno vivió sino la que uno recuerda y como la recuerda para contarla” Gabriel García Márquez.