Durante los fines de semana, hay momentos en los que la familia suele descansar después del almuerzo en la tarde viendo televisión o simplemente conversando. Pero existe una opción muy interesante que combina la el entretenimiento de la T.V. y el del convivio familiar de una buena conversación, se trata de los juegos de mesa.
Este tipo de diversión necesita un grupo de personas que interactúen directamente y oralmente, lo que, hoy en día por las nuevas tecnologías que van apareciendo, se va haciendo cada vez más raro. Así, los juegos de mesa se presentan como una excelente oportunidad para reforzar los lazos familiares a través de momentos divertidos.
En general, los juegos de mesa se pueden dividir en tres: los tradicionales, los de rol (donde los jugadores encarnan un determinado personaje) y los de guerra.
Los siguientes juegos que señalaremos son algunos de los más populares.
1. Ciudadelas
El objetivo del juego es construir edificios y el que obtenga mayor puntuación gana la partida. Los edificios se conglomeran en distritos y cada uno de los 18 personajes tiene una habilidad específica que se tendrá que saber dominar para lograr construir lo más rápidamente posible. El tiempo de duración de cada partida va de 40 a 60 minutos.
2. Carcassone
Se trata de uno de los más populares de los juegos de mesa. Inspirado en la sociedad de la edad media europea, si se desea salir victorioso se tendrá que construir castillos y adquirir propiedades como granjas, monasterios y, también, controlar campos.
No resulta muy complicado aprender las reglas del juego, en 5 minutos ya se sabrá si se quiere ser un monje, un caballero, un ladrón o un campesino.
3. El laberinto mágico
Si se tiene hijos de menos de 5 años, este es el juego ideal para compartir momentos agradables con ellos. Se trata de un pasatiempo que tiene varios elementos del mundo de la fantasía pues cada jugador desempeña el papel de aprendiz de mago que tienen que recuperar algunos objetos que ha perdido en un laberinto.
4. La isla prohibida
Este es un juego que requiere mucha colaboración entre los jugadores pues el propósito de éstos es encontrar los tesoros en una isla que se va hundiendo cada vez que los participantes hacen uso de sus turno. Cada partida suele durar, aproximadamente, 30 minutos y pueden participar un máximo de 4 personas.
