Actualmente, se constata que hay una revolución en lo que se ha dado a denominar como financiación verde, es decir, créditos para proyectos sostenibles y responsables en relación al medio ambiente. Después de la crisis financiera de 2008, varios gobiernos de la comunidad internacional introdujeron medidas para mejorar la eficiencia y la resistencia de sus sistemas financieros. Conjuntamente con esto, la adopción de la Agenda de Desarrollo 2030 y el Acuerdo de París sobre el cambio climático han logrado cambiar la perspectiva y las opiniones de muchas personas en relación a este asunto.

Este movimiento está ganando ímpetu gracias a la innovación y el liderazgo de muchas personas que quieren combinar un desarrollo sostenible y un sistema financiero eficiente. El progreso se ha logrado en varios países emergentes y, también, en las potencias económicas del mundo. Efectivamente, en cada sector se puede verificar importantes avanzos, y uno de los de que está a la vanguardia es el rubro inmobiliario.

© mspoli / Shutterstock.com
© mspoli / Shutterstock.com

Nunca se sintió más la necesidad de abordar estas preocupaciones globales y acelerar, así, una respuesta coordinada. Esto porque 6.5 millones de muertes prematuras ocurren cada año en razón de la contaminación del aire, según un informe de octubre publicado este año por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP).

Sorprendentemente, se afirma que el sector industrial ocasiona emisiones de gases de efecto invernadero que se juntan a la atmosfera como si hubieran sido generados por cuatro plantas nucleares cada segundo. Y si esto no logra sorprender, el 2015 fue el año más caluroso de que se tiene registro. Además, un número inmenso de personas, 26.4 millones, tiene que abandonar sus hogares cada año debido a desastres naturales. Por lo cual, es muy evidente que gobiernos alrededor del mundo tienen que tomar medidas para actuar inmediatamente.

También, se comprueba la existencia de un vació de inversión en la agricultura que se estima en USD 260 mil millones. De igual manera, 17% de la población tiene falta de acceso a electricidad. Entretanto, la industria de la microfinanza continúa a desarrollarse en los mercados emergentes, aunque tan sólo entre 5 a 10% se destinan a créditos bancarios que son considerados «verde».

¿Qué se puede hacer?

© ponsulak / Shutterstock.com
© ponsulak / Shutterstock.com

Actualmente, gobiernos de 60 países están ejecutando más de 217 nuevas medidas. Las cinco áreas importantes que se resaltan para lograr una buena transición son: estrategias nacionales, innovación tecnológica, finanzas públicas, concienciación y la uniformización de métodos, herramientas y estándares.

La sustentabilidad necesita estar incluida, a largo plazo, en los planes estratégicos de reforma financiera de los países. Inclusive, se necesita armonizar la tecnología financiera con el desarrollo sustentable. Siempre que sea posible, las finanzas públicas deber tener un impacto directo en los nuevos mercados que se van estableciendo. Un factor importante será el de continuar a concienciar a políticos y profesionales sobre los riegos y, también, la necesidad de realizar debates públicos. Cabe indicar que herramientas y estándares uniformizados y reconocidos a nivel internacional deben ser adoptados para que los efectos positivos de compartir información entre países sean maximizados.

El impacto de los países emergentes

© Frederic Muller / Shutterstock.com
© Frederic Muller / Shutterstock.com

Los países en pleno desarrollo han incrementado la porción de sus planes nacionales de acción de 29% a 38% en 2015. Progresos significativos se han iniciado en países como Filipinas donde la creación de una reserva de seguro para desastres con fondos público-privados hará que cualquier PyME o propietario de un inmueble esté obligado a contribuir en ella.

En otros países también se puede encontrar buenos ejemplo. Indonesia ha anunciado en enero de este año el objetivo de incrementar su utilización de energía renovable para 25% en 2025. Pakistán, un país con alto riego cuando se habla de cambio climático, ha enviado una solicitud al Fondo Verde para el Clima, ya que se estima que 7 millones de personas están en riesgo en relación a los más de 3 mil lagos glaciares que se han formado en el norte de Pakistán.

Oportunidad para el G20

© wk1003mike / Shutterstock.com
© wk1003mike / Shutterstock.com

El G20 es un foro internacional para los gobiernos y bancos centrales de las 20 economías más boyantes del planeta. Hay ahora una oportunidad para que el G20 elabore eficientes formas de financiación verde para poder desarrollar el mundo. Si consideramos el tema, hay un excedente de capital en el mundo, y los gobiernos tienen que crear las condiciones necesarias para atraer este capital. Su responsabilidad incluye establecer políticas, regulaciones, incentivos y asegurarse de que serán implementados. Los mercados globales de capital tienen inmensos poderes que, si son utilizados provechosamente, pueden crear un futuro económico sustentable en los países emergentes.