Si creías que uno de los principales problemas del ser humano en el siglo XXI es buscar un lugar donde vivir, considera esto: también en la Prehistoria el ser humano tenía problemas para encontrar la ubicación ideal para establecerse. De acuerdo con un estudio de Bryan Hockett y 
Jonathan Haws, desde el paleolítico medio los ancestros del homo sapiens han enfrentado este dilema.
De acuerdo con este estudio, los seres humanos buscaban entornos ambientales en los que se conjuntaran lo más posible las siguientes variables alimenticias: pescados, moluscos, aves, mamíferos y plantas para recolección. Desde luego el panorama ha cambiado, y aunque el alimento se puede conseguir en un supermercado, los seres humanos modernos tienen otras necesidades.
En teoría, un buen lugar para rentar o comprar una casa o departamento debe de estar cerca de tu lugar de trabajo, el precio debe ajustarse a tu ingreso mensual sin que esto desestabilice tus finanzas personales, el espacio debe ser el adecuado para tus actividades cotidianas y debe estar cerca de los sitios que más frecuentas o te gustan
(supermercados, escuelas, transporte público).
Tanto para el hombre primitivo como el moderno, mientras más de estas necesidades estén cubiertas en el lugar donde vive, más fácil será su vida. Para ilustrar esto, Lamudi, el portal inmobiliario líder en México tomó el modelo propuesto por Hockett y Haws y lo adaptó al mundo moderno. Ahora pregúntate: el lugar donde vives ¿qué tantas de estas variables cubre?
